En España, el certificado de eficiencia energética se implementó en el marco del Real Decreto 235/2013, y entró en vigor 1 de junio de 2013.
Desde entonces, es obligatorio para los propietarios proporcionar este certificado en los casos de venta o alquiler de edificios o unidades de edificios.
¿Para que sirve?
El certificado energético evalúa la eficiencia energética de un inmueble calculando el consumo anual de energía necesario para satisfacer la demanda energética del edificio en condiciones normales de ocupación y funcionamiento. Esto incluye calefacción, refrigeración, agua caliente sanitaria, iluminación y otros sistemas. El certificado asigna a cada inmueble una etiqueta energética que clasifica los inmuebles en una escala de siete letras, desde la "A" (más eficiente) hasta la "G" (menos eficiente).
¿Es obligatorio?
El certificado es obligatorio para todos los propietarios que quieran vender o alquilar su vivienda o local. Además, debe mostrarse en toda oferta, promoción y publicidad dirigida a la venta o alquiler del inmueble.
Existen algunas excepciones....
- Edificios y monumentos protegidos oficialmente por ser parte de un entorno declarado o porque su modificación afectaría su carácter o aspecto.
- Edificios utilizados como lugares de culto y para actividades religiosas.
- Construcciones provisionales con un tiempo previsto de uso igual o inferior a dos años.
- Edificios industriales y agrícolas en partes destinadas a talleres, procesos industriales no residenciales y edificios agrícolas.
- Edificios o partes de edificios aislados con una superficie útil total inferior a 50 m².
- Compra de viviendas para reformas mayores o demolición.
- Edificios residenciales que se utilizan por menos de cuatro meses al año.
Quien me gestiona este documento?
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